Estamos en los años 80 y BMW presentó un inusual prototipo del M3 destinado a pasar a la historia. Se trataba del primer M3 pick-up, un concept utilizado durante mucho tiempo para espectáculos y exhibiciones, pero que nunca salió de las puertas de la sede de BMW Motorsport en Garching, cerca de Múnich.
Como punto de partida para este proyecto especial, los ingenieros eligieron el Serie 3 E30 cabrio, cuya parte trasera se cortó y en su lugar se creó un compartimento de carga revestido de aluminio. He aquí los detalles.
Jakob Polschak, que trabajó más de 40 años en BMW M y estuvo a cargo de este prototipo, aseguró que el descapotable era ideal para crear un pick-up, debido a los refuerzos del chasis que ya incorporaba.
BMW M3 pick-up
Como curiosidad, bajo el capó se instaló un auténtico motor de la división M, concretamente el 2.0 de 192 CV de los M3 vendidos en Italia y Portugal, donde la imposición de la cilindrada hacía preferible esta solución al 2.3 S14 de aproximadamente 200 CV.
Pero, ¿cuál era el objetivo de este proyecto especial? Según las diversas explicaciones dadas por la empresa a lo largo de los últimos 30 años, los ingenieros pensaron que podría ser una buena forma de transportar componentes y piezas dentro de la fábrica de la división deportiva.
BMW M3 pick-up, interior
En 2012, tras 26 años trabajando en la fábrica para pruebas y experimentos, el prototipo se jubiló y dejó paso a un nuevo BMW M3 pick-up, esta vez basado en el E92 presentado en el año 2011.
Este último lo utilizó el fabricante bávaro para dar varias vueltas a Nürburgring, sin camuflaje, para ver las reacciones del público y los aficionados. Obviamente, también se quedó en un simple proyecto alocado.
Regresando al presente, no sólo no habrá un M3 camioneta sino que la próxima generación de la berlina deportiva podría ya ser 100% eléctrica. De hecho, ya sabes que el nuevo M5 es un híbrido enchufable con 727 CV. También los BMW M se tienen que adaptar a los nuevos tiempos...